Para muchas personas los Emiratos Árabes Unidos (EAU) se reducen a Dubái, la ciudad futurista de los rascacielos, islas en forma de palmera, enormes centros comerciales, pistas de esquí cubiertas y resorts de playa palaciegos. Pero más allá del lujo aguardan otros seis emiratos, cada cual con carácter y atractivo propios. Rica en petróleo, Abu Dabi, la capital de los EAU, se posiciona como centro de cultura y ocio. Más allá se extiende la vasta región de Al Dhafra, que alberga el extremo norte del desierto de Rub Al Khali (Lugar Vacío) y sus sinuosas dunas. Su silencio mágico solo queda interrumpido por el susurro de la arena que se desliza hacia Arabia Saudí.  Al norte de Dubái, Sharjah es el centro artístico y patrimonial de los EAU, mientras que en Ras Al Khaimah destaca la playa, con muchas actividades de aventura. Hacia el este se perfilan las escarpadas montañas Hajar, una cara de los EAU totalmente alejada del brillo de Dubái.